De los capiteles de tipo corintio de las columnas con las que se aligera el aspecto de los soportes de la puerta central de las fachadas principales (norte y sur) cuelgan grupos de frutas: granadas, peras, higos, manzanas, limones, ciruelas, uvas.
En estos capiteles hay también pequeños escudos con las siguientes figuras:
1: El león rampante del escudo de Zaragoza, que se muestra dos veces al exterior y otras dos al interior, sobre las cuatro barras de la bandera aragonesa. Bajo estos escudos de los leones aparecen dos serpientes irguiéndose entre las frutas. (La explicación se encuentra en uno de ellos – el del capitel de la columna interior de la izquierda según se accede a la planta calle por la arcada central de la fachada sur – en el que se muestra la figura completa: el escudo de Zaragoza está inscrito en un caduceo sobre el que destaca el casco alado de Mercurio).
En general el el león expresa el más alto o potente sol de julio, el signo zodiacal de Leo, y se escoge siempre haciendo referencia a la vitalidad. Este simbolismo está plenamente de acuerdo con el uso del edificio, puesto que el comercio es uno de los aspectos que «animan» y «dinamizan» un espacio urbano.
2: Tres espigas y una hoz.
3: Un pez sobre un tridente y un anzuelo.
4: Una balanza «romana» con un ramo de laurel.
5: Un ave alcanzada en pleno vuelo por una flecha.