«Yo no llegué al mercado, prácticamente nací en él»
Nos espera Ana en su puesto de mariscos selectos y nos recibe con una amplia sonrisa diciendo: «Yo no llegué al mercado, prácticamente nací en él». No nos sorprende el recibimiento, puesto que sabíamos que nos estaba esperando para contarnos todo lo que significa el mercado para ella y su familia.
Ana pertenece a la tercera generación de detallistas, tanto por línea materna como por línea paterna. La familia de su madre Mari Carmen regentó puestos de fruta y verdura, frutos secos y carne de ave, mientras que la de su padre José Luís siempre se ha dedicado al pescado. En este punto Ana, nos ruega hacer mención a sus abuelos paternos y maternos, para rendirles homenaje y respeto.
Aprovechando que ha vivido el mercado desde muy pequeña, queremos preguntarle por sus más tiernos recuerdos. Para ella, el mercado era un punto de encuentro con su familia y amigos, quedando con sus compañeras de clase después del cole para luego ir a jugar, a merendar o a ver la tele. Durante sus visitas al mercado junto su hermano Eduardo aprovechaba para dejarse ver por las paradas de sus familiares y demás detallistas y obtener siempre algún detalle, como un plátano o unos frutos secos.
En aquel mercado antes de la reforma de 1986, no todos los puestos disponían de agua corriente, teniendo que acudir a una fuente ubicada en un lateral del mercado, hoy desaparecida. Nos cuenta cómo alguna vez le encomendaron la tarea de acompañar a alguien a buscar un pozal de agua para poderla utilizar en el puesto.
Entre sus recuerdos destaca la manera tan habilidosa con la que su padre y su hermano preparaban el pescado al gusto de los clientes, sin imaginar en aquellos momentos, que el destino le depararía un puesto en el mercado al lado de su familia.
Nos cuenta como su hermano José Luís, con el que se lleva cinco años, se juntaba con más de veinte amigos y amigas que trabajaban todos en el mercado y quedaban juntos por las tardes para jugar al pin-pon, ir a los futbolines o quedar los fines de semana para salir. Un grupo tan numeroso propiciaba la celebración de cumpleaños y demás celebraciones, también alguna que otra relación, puesto que el roce hace el cariño y algo más. La diferencia de edad no le permitió unirse al grupo, pero sí se le permitió darse cuenta del ambiente que se respiraba en el mercado, que se asemejaba mucho al de una gran familia, como así nos reconoce su hermano José Luís que casualmente acude al puesto de Ana.
Tras terminar sus estudios, Ana se incorporó al mercado hace unos diecisiete años. De la mano de su padre y de su hermano abrió un puesto especializado en mariscos. Ana nos señala que las pescaderías no despachaban marisco entre semana, limitándose a incorporarlos a sus mostradores los viernes y sábados. Aprovechando esta circunstancia y en el hecho de tratar de diversificar el negocio familiar, tomó la decisión de regentar un puesto especializado en marisco. Tuvo que superar su timidez para atender al público, pero no le fue difícil puesto que contó con el apoyo incondicional de su padre y de su hermano.
Le gusta pensar que forma parte de las celebraciones de sus clientes al ofrecerles los mejores productos del mar para sus encuentros gastronómicos, en los que muchas veces se disfruta de una paella o de una parrillada de marisco. Esas reuniones refuerzan los lazos familiares o de amistad al compartir mesa y mantel y tener la ocasión de intercambiar opiniones y vivencias. Le satisface enormemente contribuir al éxito de dichos eventos, segura como está, que sus clientes serán felicitados por la calidad de los productos que adquieran en su puesto. El toque final lo pone al ofrecerles algún consejo o recomendación que es muy apreciado por sus clientes.
En el mercado reformado se imagina con un puesto grande y amplio, en el que incluso tenga la posibilidad de hacer sencillas preparaciones, como cocer marisco para ofrecerlo a sus clientes. Es plenamente consciente de los gustos y necesidades de los clientes del siglo XXI, que tienen poco tiempo y que demandan cada vez más servicio y todo tipo de facilidades. A todo lo anterior hay que seguir manteniendo el trato personalizado y directo con los clientes y demás compañeros y compañeros del mercado, que es lo que siempre ha caracterizado al Mercado Central.
Prueba de su visión de futuro es que dese hace más de cuatro años está presente en el portal www.frescoszaragoza.com, una plataforma de comercio electrónico de productos frescos junto con otros cuatro establecimientos. Este portal fue una de las plataformas de estas características en España y que hoy en día sigue funcionando y permitiendo hacer la compra cómodamente desde casa.
Tampoco es ajena a las redes sociales y a la importancia de estar presente en las mismas. Para dar muestra de ello, incluimos algunos de los vídeos en los que es protagonista. Después de visualizarlos, estamos convencidos que nuestros lectores estarán de acuerdo con nosotros en que se explica muy bien y que da gusto escucharle.